¿Quién dijo que los renders son solo promesas bonitas? En el Hotel Meridien Ra, en primera línea de playa de El Vendrell, decidieron que el diseño no se quedaría en la pantalla.
Este hotel no es cualquier cosa. Un edificio con historia, convertido en un resort de cinco estrellas, donde cada detalle está pensado para crear una experiencia sensorial de esas que no se olvidan.
En nuestro estudio, cada proyecto comienza con una idea. En este caso, una visión digital súper detallada que marcaba claramente el rumbo del diseño y la fabricación.
Los apliques de pared que diseñamos y fabricamos para el Hotel Meridien Ra no solo cumplen una función técnica de iluminación. También son un elemento decorativo clave dentro del proyecto interiorista, aportando ritmo visual, calidez y un punto de contraste cromático muy cuidado.
Realizados en metal lacado en un intenso azul, los apliques se integran perfectamente en las paredes revestidas de cerámica clara, aportando profundidad sin recargar el espacio. Su diseño vertical, estilizado y contemporáneo, se alinea con las líneas curvas y envolventes del mobiliario, y dialoga armónicamente con la paleta de materiales naturales del entorno: maderas claras, tejidos suaves y vegetación exuberante.
La iluminación que emiten es suave, indirecta y envolvente, ideal para reforzar la atmósfera relajada y sofisticada del restaurante, sin competir con la luz natural que entra a raudales por los ventanales. Una muestra de cómo una pieza sencilla, bien diseñada y perfectamente ejecutada puede elevar el carácter de un espacio.
Trabajamos mano a mano en cada fase del proceso, desde el diseño técnico hasta la entrega final. Porque si algo nos gusta más que un buen diseño, es que todo encaje como un guante. Cada aplique fue fabricado artesanalmente, cuidando hasta el último detalle: soldaduras, acabados, sistema de anclaje… todo pensado para que el resultado fuera tan fiel al render que pareciera una captura de pantalla. Solo que tocable, tangible y mucho más luminoso.
La clave: atención al detalle, flexibilidad, y una comunicación constante con los equipos de interiorismo y arquitectura. Lo digital nos marcó el camino, pero fue el trabajo real el que lo hizo brillar.
Pues ahora nos sentimos orgullosos. Porque cuando ves las fotos del proyecto real y las comparas con el render inicial, te das cuenta de que sí, es posible convertir ideas digitales en objetos reales sin perder ni una pizca de alma. Eso es lo que más nos gusta de la iluminación a medida: que puede definir por completo el carácter de un espacio.
Cuéntanoslo. En Dajor nos gusta dar vida a diseños únicos. Fabricamos lámparas a medida que no solo iluminan, sino que cuentan historias (como esta).
Y si necesitas ayuda para que tu proyecto pase del plano a la pared, ya sabes dónde encontrarnos.
